«Estrategia realista»

Estrategia Realista Galería AMS + XS Juan de Valiente 3681, Vitacura 

Inauguración martes 13 de agosto, 19:30 hrs.

Galería XS presenta «Estrategia realista», una colectiva con trabajos de Adolfo Martínez, Nicolás Miranda, Alejandra Prieto, Nicolás Radic, Francisca Sánchez, Cristián Silva y Francisco Uzabeaga. En esta exposición, los artistas recurren al realismo a partir de sistemas visuales basados en la inclusión del detalle físico. Además, el gesto realista define la posición de estas pinturas, esculturas e instalaciones dentro de estructuras narrativas más amplias, reconocibles. 

Muchos teóricos se han interesado en los matices del realismo a lo largo de la historia: desde el movimiento social francés del siglo XIX que se opone al romanticismo, hasta tendencias más recientes como el fotorrealismo, una reacción al expresionismo abstracto que se enfoca más en la forma que en el contenido. Así, el realismo se entiende como una estética no fija, que se basa en un replanteamiento activo de la relación entre realidad y representación. 

Pero la cuestión de cómo se actualiza hoy el gesto realista exige una respuesta larga y compleja, sobre todo en un contexto donde lo real está saturado de lo virtual: entregar una impresión de realidad convincente depende cada vez más de la simulación, del artificio contextual. Sin embargo, el gesto realista como tal permanece esencialmente crítico, es decir, ocurre cuando la particularidad de un personaje, de un objeto, de un entorno puede reconocerse dentro de una orquestación mayor, y al hacerlo, entrega una visión crítica de esa totalidad. 

En ese sentido, el realismo es político. El gesto realista busca trascender un nivel de asociación gráfica y operar sobre las consecuencias de la existencia del trabajo, de sus interacciones posteriores. Así, los trabajos reunidos se definen más como una operación activa que como una experiencia pasiva lo que reafirma la vigencia del realismo desde la modernidad hasta hoy, aun si se ha puesto en duda su capacidad de «destilar con éxito de la plenitud aleatoria de la experiencia la armonía generalizada de las relaciones plásticas, como si se tratara de un defecto más que de la finalidad de la estrategia realista»*. 

* Nochlin, “The Realist Criminal and the Abstract Law, Part I.” pg 54.

«Naturaleza Quieta»

«Naturaleza Quieta» de Camila Montero
Galería AMS / XS
Juan de Valiente 3681, Vitacura
Inauguración jueves 25 de abril, 19:30 hrs

Galerías AMS y XS se alegran de presentar «Naturaleza Quieta» de la pintora chilena Camila Montero. En su segunda exposición individual, la artista retrata una serie de objetos de uso cotidiano al óleo sobre tabla entelada y en pequeño formato.

Los objetos en «Naturaleza Quieta» han sido escogidos principalmente por sus dimensiones: deben ser adaptables a la forma de la mano, abarcables y manipulables. La naturaleza quieta de la piedra, de un jarrón o de un zapallo, en general objetos de fácil disponibilidad, evocan la interacción entre la corporalidad de la artista y la del objeto, así como también el sentido del tacto.

Estos elementos han sido pintados alla prima, del italiano «a la primera», es decir, la pintura transcurre en un tiempo acotado y una vez terminada y seca, no se vuelve a intervenir. Se modelan las formas y figuras mediante pinceladas de color, húmedo sobre húmedo, y un soporte firme como la tabla entelada permite borrar y mover el óleo con soltura. Así, la composición pictórica es resuelta en una sola sesión.

En estos cuadros, cuadrados perfectos, la figuración del objeto se ubica al centro sobre un plano mayormente homogéneo. El fondo actúa como marco: busca aislar al modelo de su entorno, separándolo de su contexto ordinario. A veces, el plano se ve interrumpido por la sombra del objeto, o una línea de horizonte, pero la mirada tiende a volver al centro, en un movimiento de fuerza centrípeta, a la quietud y al silencio.

La muestra permanecerá abierta hasta el sábado 25 de Mayo, 2019.

Horarios:
lunes a viernes de 11:00 – 14:00 y 16:00 – 19:30
sábados de 11:00 – 14:00

«Fuera de línea»

Fuera de Línea Galería AMS y XS Juan de Valiente 3681, Vitacura Inauguración miércoles 21 de noviembre, 7pm

Galerías AMS y XS se alegran de presentar una exposición en conjunto en su nuevo espacio temporal. «Fuera de línea» reúne obras en papel de trece artistas chilenos: Magdalena Atria, Natalia Bavarovic, Samy Benmayor, Rodrigo Canala, Rodrigo Galecio, Jaime León, Benjamín Lira, Ricardo Maffei, Roberto Matta, Álvaro Oyarzún, Cristián Silva, Patricia Vargas y Ricardo Yrarrázaval. La exposición abarca el dibujo desde la figuración a la abstracción, desde lo descriptivo a lo narrativo, desde la rigurosidad del dibujo técnico a lo ornamental y la ilustración. «Fuera de línea» busca explorar las posibilidades expresivas del dibujo como lenguaje gráfico universal, reivindicándolo como obra de arte autónoma.

«Écrire, pour moi, c’est dessiner, nouer des lignes de telle sorte qu’elles se fassent écriture, ou les dénouer de telle sorte que l’écriture devienne dessin»

«Siempre he dibujado. Escribir, para mí, es dibujar. Anudar las líneas de forma que se vuelvan escritura, o desatarlas de forma que la escritura se convierta en dibujo.»

Jean Cocteau

Horarios: lunes a viernes de 11:00 – 14:00 y 16:00 – 19:30 sábados de 11:00 – 14:00 horas.

«Artefactos»

Galería XS presenta Artefactos, una selección de fotografías de Javier Aravena, Alexis Mandujano, Sebastián Mejía, Cristóbal Palma y Carolina Spencer.

En esta exposición se retrata la vida vegetal en relación a lo urbano, a lo íntimo, a lo alterado y artificial. Se destaca la “planta” como idea difusa, como objeto que fluctúa constantemente entre lo natural y lo cultural.

En un continuo de contextos silvestres, semi cultivados y domesticados, los sujetos responden a estados humanos intencionales. La palmera puede interrumpir el paisaje urbano, como en el trabajo de Sebastián Mejía, atravesando espacios públicos, sobrepasando paneles improvisados de un centro comercial. Pero también pueden funcionar como complemento; Cristóbal Palma adjunta la carga simbólica de un olivo a un monasterio modernista, o la resiliencia de un cactus al edificio de la Cepal.

La tensión entre la ciudad de Santiago y su flora asociada también se encuentra en la narrativa historicista y privada. Javier Aravena registra la resistencia de la flora en los relaves de la mina La Africana en Pudahuel, luego de haber terminado su faena hace más de treinta años. En las fotografías de Carolina Spencer se reconoce un filodendro por su forma y simetría. En un escenario intimista, al interior de consulta de atención psiquiátrica en Providencia, sus hojas trepadoras pueden ser solo ornamentales, o una alusión a la fragilidad de la conciencia.

La idea de la planta como objeto natural puede corromperse desde adentro y desde afuera. Una flor se puede observar bajo un punto de vista técnico e industrial desde la ingeniería genética, o en la fotografía de Alexis Mandujano, con herramientas visuales propias del cine y la publicidad. Pero más que la artefactualización de las plantas en objetos bien diseñados, la alteración de la imagen, su individualización extrema, nos recuerda que las ideas de planta, vida y naturaleza ya no se pueden equiparar.

Artefactos permanecerá abierta desde el 7 de agosto hasta el 1 de septiembre en Avenida Nueva Costanera 3723, Vitacura, Santiago. Horarios: lunes a viernes de 11am a 2pm y 4pm a 7:30pm, sábado de 11am a 2 pm.

«Viento Norte»

Exposición de Pilar Mackenna. Dibujos, acuarelas y esculturas.

Jueves 28 de junio al sábado 28 de julio de 2018 / Av. Nueva Costanera 3723 segundo piso, Vitacura / Horarios: Lunes a Viernes de 10:00 a 14:00 hrs y de 16:00 a 20:00 hrs. Sábados de 11:00 a 14:00 hrs.

La obra de Pilar Mackenna (Santiago, 1985) reúne estas técnicas para describir la relación de los seres humanos con el medio ambiente. Valiéndose de un lenguaje que funde abstracción y figuración, la artista continúa -en su segunda individual en XS- su reflexión artística sobre el viejo problema de naturaleza y cultura.

Se trata de imágenes que describen utensilios, formas básicas de vivienda, o artefactos de sobrevivencia. También diagramas climáticos, eólicos o geológicos pintados con acrílico o acuarela sobre papel. Un arsenal descrito con la precisión de un manual de instrucciones. Mackenna ofrece formas sutiles de ocupar el espacio natural: un romanticismo discreto.

La muestra, se vuelca a lo natural obviando la espectacularidad postal de las grandes vistas y opta en cambio, por los recortes parciales de la topografía. La naturaleza como objeto de conocimiento científico. Su contemplación y las emociones que despierta en la propia artista, son abordadas desde un filtro que impone no solo un criterio racional, también estético. Diagramas, gráficos y taxonomías aparecen a ojos de Mackenna, como formas distantes de pensar la naturaleza que la apasiona. Un mundo aparte también, uno que anticipa y acompaña el desarrollo de la pintura abstracta. Sin embargo, lejos de agobiar al espectador con datos, descripciones o cifras, las imágenes parecen mapas mudos. Ausentes de palabras, la visualidad técnica se vuelve protagónica. Como si el mundo que quisiera describir fuera un nuevo espacio que habitar, un paisaje puro, abstracto y controlado. Una naturaleza no desbordada por el azar o la tragedia.

Desde una mirada centrada en la observación de lo macro y lo micro, Pilar Mackenna genera constantes relaciones, conceptuales o formales, donde figuración y abstracción se encuentran en tránsito de lo bidimensional a lo tridimensional.

Sus pequeñas esculturas, hechas a partir de troncos encontrados, tienen la misma sencillez de las herramientas que describe en sus dibujos. Operaciones muy simples con los materiales, para resolver, ya no los problemas prácticos de una herramienta, sino los problemas formales que ocupan a la artista. Estas obras, seductoras y delicadas a la vez, desarrollan no solo un refinado lenguaje formal sino una sensible vinculación con el cosmos.

Pilar Mackenna (Santiago, 1985) estudió Licenciatura en Artes Visuales de la Universidad Finis Terrae, posteriormente realizó tutorías de arte en Taller Bloc, cursos de Ilustración en Parsons The New School of Design, Nueva York y de Fotografía y Diseño en School of Visual Arts, Nueva York. De sus exposiciones individuales destacan: Mary Bell, en Galería Moro (2010) ,Un lugar imposible en Galería XS (2013) y Ecosistemas en Proyecto Gabinete FLORA Ars+Natura, Bogotá, Colombia (2016). Ha participado en diversas exposiciones colectivas, tanto en Chile como en el extranjero destacando Atlas Austral, Centro Cultural de Coyhaique (Proyecto FONDART 2016) The Olimpic Fine Arts Exhibition en The Barbican Center de Londres, UK (2012) Medidas Variables en MAC Valdivia (2012), Formas de Habitar en Galería Balmaceda Arte Joven (2014) Concurso Cabeza de Ratón Bicentenario en MAVI (2010). De forma paralela trabaja en la Facultad de Artes de la Universidad Finis Terrae y como ilustradora freelance.

«Navegando VI»

Martes 27 de marzo al viernes 27 de abril de 2018 / Horario: Lunes a Viernes de 10:00 a 14:00 hrs y de 16:00 a 20:00 hrs. / Sábados de 11:00 a 14:00 hrs / Av. Nueva Costanera 3723 segundo piso, Vitacura.

El próximo martes 27 de marzo se inaugura en Galería XS la exposición Navegando  Vi de la artista  Paula Subercaseaux.  

Esta exhibición se compone de tres tipos de obras realizadas por Paula durante el año 2017. El primero de ellos, titulado  Brisas en la laguna, corresponde a un conjunto de ocho piezas de gres dispuestas sobre plintos individuales, que representan a grandes masas de agua. El segundo, En la orilla, a cinco acuarelas de gran formato en las que enfatiza la marca dejada por el pigmento acuoso en su tránsito por la superficie del soporte. Y, finalmente, dos trípticos de madera llamados Desde lejos, flujos de oro en cuya superficie creó un diseño abstracto, mediante el uso de la tradicional técnica de dorado con pan de oro, que emula un curso de agua.

El principal asunto que anima y unifica a este conjunto es la reflexión en torno al  devenir infinito del agua y la huella que ésta deja al fluir, lo que supone una profundización en la búsqueda conceptual y estética iniciada tempranamente por la artista durante sus años de estudiante las cuales la han llevado a explorar la materia primigenia del cosmos y su relación con la psique humana desde una perspectiva naturalista que cobra particular vigencia en el presente.

Paula Subercaseaux García de la Huerta (1970) es licenciada en artes con mención en pintura por la Pontificia Universidad Católica de Chile. Su principal medio de trabajo ha sido la acuarela, aunque también ha empleado diversos materiales de origen natural como la greda, el crin, las cenizas, entre otros, los cuales interviene cuidadosamente con el fin de que éstos no pierdan sus propiedades originales.

«La Caverna»

La muestra permanecerá abierta hasta el 31 de enero de 2018.

Para más información visita www.xsgaleria.cl

Av. Nueva Costanera 3723 segundo piso, Vitacura

Horarios: Lunes a Viernes de 10:00 a 14:00 hrs y de 16:00 a 20:00 hrs. / Sábados de 11:00 a 14:00 hrs.

Exposición colectiva
Galería XS-Marlborough
11 de enero de 2018

Natalia Babarovic Antonia Daiber Pablo Ferrer Adolfo Martinez
Francisco Morales Kevin Parra Christian Yovane

-La caverna es una muestra transgeneracional, curada por la artista Natalia Babarovic, que reúne el trabajo de cuatro pintores –ella, Antonia Daiber, Pablo Ferrer, Francisco Morales–, junto a la obra en papel de Christian Yovane y los ensamblajes de Adolfo Martínez y Kevin Parra. Siete artistas con mucho oficio y poca estrategia: las similitudes a explorar siguen con la claridad, el humor, la falta de política y el exceso de conciencia.

“La Caverna es un poco nombre de discotheque o de club, remite a un lugar de debut de bandas desconocidas, y por supuesto a la cuestión de Platón y otras cuevas artísticas, desde Lascaux y Altamira”, escribe Natalia Babarovic en la definición de esta muestra. “Es también un escondite transgeneracional cuyo objetivo es indicar, recordar al observador, que aún hay vida subterránea en el arte, que no todo cambia como la ciudad y la muchedumbre a la luz del día. Somos un grupo de cavernícolas o, si se quiere, los últimos clientes de la disco La Caverna”.

Esta muestra invita a descubrir las coincidencias y diferencias en la obra de siete artistas en apariencia disímiles. Los une algo así como lo puro de su gesto, la excelencia técnica, la seriedad humorística, parecer extemporáneos e incluso anticuados. “Lo interesante es que en las técnicas de cada uno parece haber, respecto de la moda del momento, una especie de retroceso. Tal vez en el mismo momento en que la técnica en cuestion empezó su apogeo, la escultura, el pastel, la apropiación, el ensamblaje parecen revolucionarios”, agrega Babarovic.

En la muestra participan dos jóvenes “como heraldos del futuro”: Francisco Morales (1990), que mostrará nuevas trabajos de pintura ejecutados sobre cuadros previos –después de su brillante muestra Conflicto de interés (agosto 2017, Local). Kevin Parra (1992), ensamblador experimental que usa papeles y trabajos de sus estudiantes o propone objetos encontrados o inventados, levantará “Sísifo”, una suerte de roca, un objeto pesado y grande, sujetada en una varilla frágil, delgada y larga, además del ensamblaje “En este país no se mueve ninguna hoja sin que la este moviendo yo, que quede claro”.

Los más experimentados, o con obra conocida y visible, son Adolfo Martínez (1976), escultor, recolector y ensamblador que explora los límites de lo rural y lo suburbano: una sus piezas será un ave embalsamado que recoge o hace volar prendas movedizas. Christian Yovane (1977) presentará una variedad de la obra gráfica y sintética sobre papel, con formas que distorsionan la cultura pop, que caracteriza su trabajo. Antonia Daiber (1984) mostrará una serie de pasteles grasos sobre lija de diversos tamaños y colores (amarilla, roja y negra). “En estos pasteles aparece lo opaco, rasposo y matérico. Una vez más la representación se vuelve algo abstracta debido a la presencia material de los trabajos y a los encuadres fragmentarios escogidos”, señala Daiber. Como contrapunto incluirá pinturas al óleo líquidas, transparentes y livianas, también imágenes difusas y abstractas.

Pablo Ferrer (1977) presentará papeles grandes que muestran diferentes caídas (del árbol, del cielo, de la gloria) y una serie de pequeños cuadros sobre recuerdos de situaciones vistas junto al muro de su casa. Natalia Babarovic (1966), en tanto, mostrará una selección de sus series de pinturas sobre cartón, que combinan imágenes encontradas en fotografías con trazos y manchas hechos con spray o pigmentos puros, además de óleos sobre tela en gran formato.

Artistas

Natalia Babarovic (Santiago, 1966), pintora y licenciada en Arte en la Universidad de Chile. Ha expuesto su trabajo en Prospect and perspective, recent art from Chile, colectiva, San Antonio Museum of Art, Texas, 1997; Tombs and River, individual, Mafuji Gallery, Londres, 2000; en Santiago: 100 años de arte en Chile, colectiva, Museo Nacional de Bellas Artes, 2000; Cautiverio feliz, individual, Sala Gasco, 2005; Del otro lado, colectiva, Centro Cultural la Moneda, 2006; Novelita, individual, Galería Florencia Loewenthal, 2007; Campos cercados, con Pablo Ferrer, Galería Animal, 2008; Hufmann-Babarovic, Galería D21, 2010; Como desaparecer completamente, individual, MAVI, 2013; Performances, galería González y González, 2014; Instantáneas, 2015, y Encandilados, 2016, galería XS. 

Durante más de veinte años ha realizado una investigación pictórica de la percepción de la realidad, que es también una investigación psicológica, epistemológica, ontológica del mundo. La fotografía cumple en esta investigación, el papel fundamental de prueba de existencia de ese mundo que es siempre pasado y de mapa lumínico de la escena desaparecida.

Antonia Daiber (1984). Licenciada en Artes Plásticas y magíster en Artes Visuales de la Universidad de Chile. Ha participado muestras colectivas como Croma, Artespacio, Santiago (2011); Cuchillo al agua, Galería Balmaceda, Santiago, y Topsy en Six D.O.G.S, Atenas (2010); Calibre 14, MAVI, Santiago (2009), Aprox, MAC de Quinta Normal (2007). Participa en las muestras bipersonales, Mirada móvil en Factoría Santa Rosa, Santiago (2015) y El Dorado en la embajada de Chile en Bélgica (2013). En 2016 participa en la feria Ch.ACO junto a la galería El caballo verde y en 2017 es invitada a la exposición 27 pintores en Galería XS. Presenta su primera muestra individual en 2010, Fuera de Campo, en Galería Isabel Aninat; en El caballo verde realiza Pintura de viaje (2011), Nubes altas (2014) y La hora del pintor (2017). En galería Artium presenta Traveling (2013) y en Centro de Extensión UC Nocturnos (2016).

Escribe: “Mi trabajo se ha vinculado al paisaje y a una representación incierta de éste. He utilizado diversos medios como la pintura, el dibujo, la fotografía, el video y la intervención. Un ánimo contemplativo y misterioso se manifiesta en los videos realizados a través de capturas fijas carentes de sonido y narración. En estos registros aparece un fragmento de paisaje aparentemente inmóvil; el vuelo de un insecto, la respiración de un cuerpo o el movimiento de una rama seca transforman estas capturas en fotografías vivas.
Por otra parte, las pinturas y los dibujos son en su mayoría difusos, atmosféricos y están casi siempre al límite de la abstracción; por medio de manchas líquidas o achurados vibrantes se va conformando una imagen difusa, un paisaje sin línea de horizonte. En estos trabajos aparece la materialidad del medio escogido, la presencia del color y su vibración por medio de mezclas ópticas. En este sentido podrían emparentarse a los videos en los que el pixel vibra a través de la mezcla óptica que conforma la imagen digital”.

Pablo Ferrer (1977). Artista visual, licenciado en Artes Visuales, mención pintura, Universidad de Chile (2002). Magíster en Artes visuales de la misma institución (2003- 2004). Académico de la Universidad de Chile. Ha obtenido el FONDART los años 2002, 2005 y 2015. Ha exhibido individual y colectivamente en Chile y en el extranjero. Dentro de Chile ha expuesto en espacios como Matucana 100, Galería Animal, Gabriela Mistral, Muro Sur, D21, Sala Sam, MNBA, en la primera Trienal de Chile en el MAC, entre otros. En el extranjero ha participado en diversas ferias de arte y en muestras colectivas en Ciudad de México, Atenas, Bruselas, Lima, Buenos Aires, Bogotá, Madrid y Berlín.

Escribe: “Mi producción visual ha estado centrada en la pintura y en una reflexión constante en torno a la representación. Mis pinturas toman como punto de partida la idea de que toda imagen arrastra un pasado sedimentado que retorna en ella. Por otro lado he indagado en diversos modos de construcción de escenas en las que se mezclan el uso de la maqueta y el collage. De esta forma he buscado establecer diversas aproximaciones al estatuto del modelo en la pintura. En paralelo he realizado una investigación con medios como el video, explorando aquellos aspectos temporales que no se podían enunciar elocuentemente dentro del campo de la pintura”.

Adolfo Martínez (Santiago, 1976). Artista visual y docente. Licenciado en Arte y Magíster en Artes Visuales en la Universidad de Chile. Desde 2002 hasta la fecha se desempeña como profesor del área de escultura en la misma institución. Además de ejercer la docencia, ha tenido una prolífica producción de obras en múltiples exposiciones, en galerías como Gabriela Mistral, D21, Animal, Museo de Arte Contemporáneo, Museo Histórico Nacional, Sagrada Mercancía, La Palmilla Oriente, Museo Nacional de Bellas Artes o centros culturales como CCU, MAVI, Casa Plan, Concreta Matucana 100 y Centro Nacional de Arte Contemporáneo Cerrillos.

La obra de Martínez indaga en torno a la inminente transformación de la ruralidad que colinda con la urbe, donde sus límites en cuanto a territorio e identidad se hibridan, conformando la irrupción violenta de un nuevo imaginario suburbano. Su propuesta visual establece vínculos interdisciplinarios desde lo escultórico, lo cual lo ha llevado a explorar otros lenguajes como la fotografía o la intervención de objetos encontrados.

Francisco Morales V. (Santiago, 1990). Pintor. Ha exhibido parte de su trabajo en No estaré para contarlo (Bikini Wax, México DF, 2017); Conflictos de interés (Local Arte Contemporaneo, Santiago, 2017), Christina Ricci (BECH, 2016), The Fellas (Espacio Falso, 2015), Aquí no está (Macchina, 2014), Común & Corriente (APECH, Santiago, 2013)

Señala: “La caverna, además de concepto, se puede usarcomo verbo, como espacio de suspención en donde se procesaría una imagen exterior, para una ejecución en el exterior: cavernar. La caverna puede ser una proyección fisica de la mente. Un lugar con límites, privado, como una pieza, donde uno hace y deshace mentalmente. Aunque todo el tiempo pasemos por el exámen de conciencia, la pieza o cueva es el lugar donde la cabeza se expresa físicamente, o descansa. Lo diferencio del taller, al considerar que tiene una utilidad productiva, carácter diferente al de la pieza, el lugar donde uno se muere todos los días. Suena cursi pero uno esta dimensión con la de los cavernarios, que dormían en las cavernas y experimentaban la maxima vulnerabilidad (el sueño) en ellas. Cavernas, chozas, lo que se pueda: se asocia rápidamente con rudimentos, precareidad, cosas toscas. La caverna para mí está mucho más cerca que los cientos de miles de años e historias que nos separan de ellas”.

Kevin Parra (Santiago, 1992). Licenciado en Artes Visuales y en pedagogía en Artes Visuales de la Universidad Andrés Bello. Sus exposiciones individuales son Malos hábitos de estudio, Biblioteca Viva Norte, Santiago (2017), Los dolores del corazón, Biblioteca Viva Norte, Santiago (2016) y Grato ambiente familiar, Galería Laboratorio 01, Santiago (2014). Además ha integrado las muestras colectivas Tutopia, Galería Casa Uno, Santiago( 2017); Donde vivimos nosotros tenemos jardín, Galería Balmaceda Arte Joven (2017); Lecturas Visuales de Poesía Medular, CCMP, Rancagua (2016); Bienestar, Galería Campus Creativo, Santiago (2016); Identidad, Expresión, Independencia, Biblioteca pública de Independencia Pablo Neruda, Santiago (2016); La Resistencia, Centro Cultural de Recoleta, Santiago (2014); El Buffet, Galería El Cubo, Santiago (2014); Paisajes, Sala Manuel Rodríguez, Santiago (2014); Apología de lo Real, Galería Sub-Terra, Santiago (2013)

Señala: “La caverna es una trinchera de resistencia. Dejar de creer, y enfrentarse a la realidad. Materia bruta. Lo prehistórico siempre es tosco porque es puro material”. 

Christian Yovane (Santiago, 1979). Licenciado en Artes Visuales (2002) y egresado del Magíster en Artes Visuales de la Universidad de Chile (2004). Entre sus exhibiciones individuales destacan: Los Infelices , Metales Pesados, Santiago (2014); Crack (Bi-personal), González y González, Santiago (2012);  La Cruda , Galería D21, Santiago(2012). Y en las colectivas: Haciendo Días, Centex CNCA, Valparaíso (2017);  FILAAC, Galería Marta Traba, Sao Paulo (2014) ; Robo con Fractura, Local Arte Contemporáneo, Santiago (2013); SANFIC 08’ Shoot the Shooter: Panorámica de Videoarte Latinoamericano , Centro Cultural La Moneda , Santiago (2012); Operación Verdad o la Verdad de la Operación, Museo de la Solidaridad Salvador Allende, Santiago (2011); Indios Verdes Proyecto Sin Muros, Museo Nacional de Bellas Artes, Santiago (2011); Imagen Local, Museo de Arte Contemporáneo MAC, Santiago (2011); Topsy, Six D.O.G.S Gallery, Atenas (2010); Estrechez de Corazón, galería D21, Santiago (2009);  Cohortes 02-07’ Museo de Arte Contemporáneo, Santiago, (2008); In.Co.Nexo, BAC Festival 08′, CCCB , Barcelona (2008); Apetito de Destrucción, galería Animal, Santiago (2005).

Escribe César Gabler: “Christian Yovane ha desarrollado su obra en los medios del video y el dibujo. El dato no es irrelevante. Valiéndose de tintas, dispone sus imágenes a partir de operaciones que deben tanto al montaje cinematográfico, como al cadáver exquisito de los surrealistas. Sus personajes, casi siempre extraídos de revistas antiguas, se aíslan o se funden, provocando un particular efecto de extrañeza. Cuando opta por aislar las figuras parece sugerir que algo se esconde en ellas. La aparente familiaridad se vuelve inquietante e instala una pregunta sobre el sujeto que se tomó el trabajo de elegirla y de copiarla. El ojo de Yovane parece debatirse entre la arqueología, la nostalgia y una afición casi patológica por las huellas menos esperables del pasado. Siguiéndolas, el espectador desemboca en un relato que se aleja de la moral y la pedagogía”.