«América, tierra de jinetes. Siglos XIX al XXI»

América, tierra de jinetes. Siglos XIX al XXI, aborda la cultura ecuestre de nuestro continente con cerca de 400 piezas provenientes de más de 60 colecciones públicas y privadas de Argentina, Chile, Colombia, España, Estados Unidos, México, Perú y Uruguay. La muestra es organizada por el Banco Nacional de México – Citibanamex, a través de Fomento Cultural Banamex, A.C., con el generoso apoyo de Fundación Roberto Hernández Ramírez, Fundación Díez Morodo y la colaboración de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México.

Este proyecto expositivo y editorial es el resultado de cinco años de investigación y curaduría realizada por la doctora en Historia Guadalupe Jiménez Codinach, de México, con la asesoría de los investigadores Roberto Raúl Vega de Argentina, Celina Rodríguez Olea y Alejandra Serrano de Chile y Claudia Balarín de Perú. La exposición muestra cómo, según la geografía, los climas y el poblamiento de cada región, surgió en el siglo XIX un tipo de jinete americano que, con el tiempo, se convirtió en estereotipo nacional en los diferentes países del continente: el charro en México, el llanero de Colombia y Venezuela, el chalán de Perú, el gaucho de Argentina, Uruguay, Paraguay y Brasil y el huaso chileno.

Cada uno de ellos ha creado una cultura propia que se plasma en su indumentaria, aperos, música, danza, literatura, arte popular, fotografía y cine; elementos que se han arraigado a la identidad de los diferentes países de América. El huaso del valle Central de Chile estará presente en Sala Pacífico. Su figura, síntesis del legado español e indígena, es revisitada a partir de los productos manufacturados que utiliza, de los paisajes y formas de vida que se reflejan en ellos, y de su trascendencia en la cultura agrícola – rural de Chile.

Kaweju, más allá de la muerte

El equipo del Centro Cultural La Moneda incorporó un eje en esta muestra con la presencia del jinete Mapuche, explorando la vinculación de este pueblo con el kaweju (caballo en mapuzugun). Más que medio de transporte, el caballo es moneda de cambio, símbolo de poder y se incorpora en prácticas culturales y ceremoniales Mapuche, acompañándolo incluso más allá de la muerte.

CCLM concibe esta exposición como una oportunidad para reflexionar sobre la configuración de nuestra identidad, como chilenos y latinoamericanos. Complementamos el recorrido abriendo una instancia de encuentro y debate que considera las corrientes historiográficas que en la actualidad abordan, con diferentes miradas, temáticas como la participación de las mujeres o las voces de los pueblos indígenas.

América, tierra de jinetes. Siglos XIX al XXI tendrá actividades para toda la familia en el Espacio Activo y la Zona Interactiva Mustakis y una agenda de extensión de la exposición durante todo el verano.

30 de noviembre, 2018 – 10 de marzo, 2019
Salas de exposición: Andes y Pacífico | Nivel -3
Entrada general $3000, estudiantes y convenios  $1500
Tercera edad entrada liberada
Lunes a domingo de 9:00 a 21:00 horas
Gratis todos los días hasta 12:00 horas Importante: nuevo horario gratuito de 15:00 a 19:30 horas a contar del 2 de enero de 2019

«La exposición pendiente 1973-2015. Orozco, Rivera, Siqueiros»

La importante muestra de artistas mexicanos que no se inauguró en septiembre de 1973.

“La ruta a México es: Antofagasta, Lima, Panamá, México y escala técnica en esos lugares. Comuníquenlo al canciller Rabasa y díganle que cruce los dedos”

El texto corresponde a un telegrama enviado en septiembre de 1973 por Gonzalo Martínez Corbalá, embajador de México en Chile, antes de subir al avión que lo trasladó a su país junto a 180 obras de la exposición que se suspendió antes de su inauguración programada para el 13 de septiembre de 1973, en el Museo Nacional de Bellas Artes de Chile. Junto a él viajaban los familiares del presidente Salvador Allende.

La cancelación de la exposición se produjo en medio de la convulsión del golpe militar y sin que muchos se enteraran. La muestra Orozco Rivera Siqueiros. Pintura Mexicana presentaría al público chileno una de las colecciones de arte moderno más importantes del continente. Cuarenta y dos años después y para celebrar el 25° aniversario del restablecimiento de relaciones diplomáticas entre México y Chile, ambos gobiernos han realizado un esfuerzo conjunto para reeditar esta muestra con una selección de las 76 obras originales y pertenecientes al Museo de Arte Carrillo Gil.

Las pinturas originalmente de propiedad del coleccionista de arte mexicano Álvar Carrillo Gil, fueron donadas al Estado mexicano en 1972, tras lo cual comenzó una serie de exposiciones itinerantes a nivel mundial, siendo Santiago de Chile el primer destino escogido para ello.

Las gestiones del museógrafo y comisario de exposiciones mexicano Fernando Gamboa, y del entonces director del Museo Nacional de Bellas Artes, Nemesio Antúnez permitieron el regreso de las obras a su país de origen.

Junto a las obras se exhibirán testimonios de puño y letra de Fernando Gamboa, quien vivió el golpe de Estado y los hitos que le sucedieron mientras se hospedaba en el Hotel Carrera, frente a La Moneda. Gamboa describió a Antúnez como “el prototipo de la amistad, de la decencia, y del artista e intelectual humanista chileno… El estilo del Museo”.

Sobre la relevancia del contexto histórico de la muestra La exposición pendiente 1973 – 2015. Orozco, Rivera y Siqueiros, el director del Museo Nacional de Bellas Artes, Roberto Farriol, señala: “esta exposición, junto con presentar obras valiosísimas de los tres maestros muralistas, es también un ejercicio de relectura de estas mismas desde una visión crítica. Por ello, y con el objetivo de contextualizar un momento histórico de incuestionable importancia, se ha trabajado en la investigación y documentación entre ambas instituciones, a cargo de Carlos Palacios, curador del Museo de Arte Carrillo Gil y en forma colaborativa, con Gloria Cortés, curadora del Museo Nacional de Bellas Artes”

Según Ángel Cabeza, director Dibam “la obra de estos tres artistas es parte del patrimonio artístico latinoamericano, y es en ese contexto que el gobierno de Chile, a través de sus instituciones involucradas, asume esta verdadera deuda cultural de más de cuarenta años con Chile y también con México. Esta exposición es muy importante, en tanto retoma una fluida relación cultural que se vio violentamente interrumpida”.

La exposición

La exhibición se realizará en el primer piso del MNBA, en los mismos espacios que Antúnez y Gamboa destinaron a la muestra original, utilizándose en esta ocasión las rotondas de dichas salas como espacios para el despliegue de documentos y testimonios de época que dan cuenta de los esfuerzos realizados para realizar la muestra en 1973 y su retorno a salvo luego de la cancelación de su apertura.

Destaca entre las obras las pinturas cubistas El arquitecto (1915-1916) y Maternidad (1916) de Diego Rivera.

De José David Alfaro Siqueiros, se exhiben veintiuna obras, pinturas, litografías y croquis. Entre ellas Zapata, estudio para el mural del castillo de Chapultepec(1966), Torso femenino (1945) o el Retrato de José Clemente Orozco (1947). La relación de Siqueiros con Chile, está representada por los grabados realizados para ilustrar el Canto General de Pablo Neruda.

La selección más numerosa corresponde a cincuenta obras de José Clemente Orozco con óleos y grabados previos a los murales de gran contenido político. Entre ellas se aprecian obras emblemáticas como El fusilado (1926-28), El réquiem (1928), Pancho Villa (1931), Cristo destruye su cruz (1943) o Los teules IV (1947).

Desde el 20 de noviembre de 2015 hasta el 21 de febrero de 2016.